Marx y la Biblia



5. Fe y Dialéctica. La fe en la Biblia

(Cont., viene del día 8)

La fe bíblica se entiende como esperanza, pero como una esperanza que no conoce límites. Y el hecho de que se afirme como creer en el Dios que resucita a los muertos, lo demuestra.

En este sentido podemos esquemáticamente distinguir en la fe neotestamentaria tres elementos existenciales, de los cuales los dos primeros le son comunes con la fe veterotestamentaria, sin que ello signifique que el tercero le es extraño a ésta: 1. la fe es creer que nuestro mundo tiene remedio; 2. la fe es creer que nuestro mundo tiene remedio porque Dios interviene en la historia humana; 3. la fe es creer que nuestro mundo tiene remedio porque Dios interviene en nuestra historia en el hecho histórico llamado Jesucristo.

Conviene repetir que quien carece del primer elemento no puede creer en los otros dos. Y en este sentido es verdadera la frase del jesuita Teilhard citada por el marxista Garaudy(Perspestivas del hombre. Buenos Aires 1965, 205

Me pregunto si hoy la humanidad no está realmente
a punto de dividirse entre los que creen y los
que no creen en el porvenir del universo. Y me
siento más decidido que nunca de unirme a los pri-
meros para la conquista del mundo.

Ahora hagamos constar que la identificación de la fe con la esperanza ilimitada está en la definición misma de fe que Heb 11, 1 nos ofrece; definición en la que la dogmática literalmente "se fijó" como si los evangelios no existieran. "La fe es firmeza de lo que esperamos, convicción de lo que(todavía)no vemos"...En Heb 3, 14 está íntimamente vinculada a la idea de esperanza: "hemos venido a ser partícipes de Cristo, con tal que mantegamos maciza hasta el fin la firmeza del comienzo...

Todavía podemos mejorar la traducción de Rom 4, 18 y postular este versículo paulino como la mejor definición de la fe: "Más allá de la esperanza creyó en la esperanza"...Lo cual es más tangible en Pablo que en otros autores, Rom 12, 3 y 2 cor 8, 3. La fe es la ilimitación de la esperanza.

Este es el significado de la fe en labios de Jesucristo(supra 233-234), tanto en la frase "tu fe te ha salvado" como cuando hablaba de la fe que mueve montañas. Hemos visto, además, que la fe auténtica se jerce "creyendo que"(ibid. 235-240). Es evidente que no cualquier hecho puede ser "creído que sucedió" por una fe que se identifica con la esperanza. Estamos hablando de condiciones existenciales de posibilidad, contra las cuales no hay dogmatismo que valga.

"Que el reino ha llegado", sí tiene sentido para la esperanza que "cree" que nuestro mundo tiene remedio; que Cristo, primogénito entre muchos hermanos ha sido resucitado, sí tiene sentido para la esperanza. Para la fe la historia no es un conglomerado de hechos brutos; se fija sólo en los que tienen relevancia para la esperanza de la humanidad, y quien éstos no percibe no conoce la verdadera realidad y sentido de la historia.

La fe es soteriología. Y una soteriología que puede ser entendida sin esperanza, no tiene razón de existir.

Ver: José P. Miranda, Marx y la Biblia. Crítica a
la filosfía de la opresión

PD. Quiero decir a los lectores que en este libro que seguimos, se habla poco de Marx, se le menciona al principio y alguna otra vez; se le compara a los profetas del antiguo testamento, pero de lo que tratamos más bien es de la exégesis bíblica y, en ella resalta la justicia social para que todos los ciudadanos del mundo vivan con la misma dignidad. Esa es la voluntad del Dios Bíblico y el evangelio de Cristo. Decir tambien que la traducción de este libro al español está muy mal hecha.
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