Obispos sed santos como:

JUAN ENRIQUE NEWMAN, obispo y cardenal.

* Londres 1801 +Birmingham 11 agosto 1890

Muy famoso en nuestro tiempo: en nuestra juventud lo conocíamos como "El cardenal Newman" y todos sabíamos que era un gran converso del anglicanismo. Pero no le fue fácil llegar al convencimiento de que la religión católica era la verdadera. No tenía al papa ninguna simpatía, aunque le encantaba la Ciudad Eterna.


Enrique Newman era de familia noble. Nació en 1801 de familia aristócrata. Fue educado en los mejores colegios y se hizo sacerdote anglicano. Arrastraba a la juventud, sobre todo la universitaria, pues fue profesor, párroco y formador universitario en Oxford. Su gran ilusión era llegar a la verdad. Le encantaba la liturgia católica y el culto a la Eucaristía, los templos y altares de la Virgen María.

Él quería encontrar la verdad plena; pensaba mucho, estudiaba mucho. La fe anglicana no le parecía completa. La muerte prematura de una hermana joven le sumió en el dolor y en una profunda crisis. Cae enfermo y estuvo próximo a la muerte. "Yo no puedo morir - decía - porque aún no he llegado a la verdad plena". Él y un grupo de amigos llega a la conclusión después de mucha reflexión: "La verdad plena está en el catolicismo. La católica es la única Iglesia establecida por Cristo". Cuarenta y dos obispos anglicanos condenaron aquel movimiento hacia Roma. Y escribía Newman: "Solo la fe y la santidad son irresistibles".
Ya no puede seguir por más tiempo como párroco anglicano. Se despide con lágrimas y se queda muy solo; pero se siente luego feliz en su nuevo hogar católico. Él y sus amigos convertidos se sienten seguros, a pesar de las condenas de los que fueron suyos. Viven felices como recién nacidos a la fe verdadera. En 1845 el Padre Domingo llega a la casa humilde de los amigos de Newman; se confiesan. Proclaman juntos la misma fe y celebran la Eucaristía.

Algunos católicos dudaban de su sincera conversión. Sufrió mucho. Con el tiempo, el papa León XIII le nombró cardenal de la Iglesia católica en Inglaterra. Escribió bastante. Entre otras cosas "La vida interior", "Defensa de la propia vida", reflejo de su alma.


En sus escritos íntimos Newman decía: "Si estoy enfermo, que mi enfermedad le sirva; si dudo, que le sirva mi duda... Nada hace Él en vano. Puede quitarme a mis amigos, puede precipitarme entre extraños, puede hacer que me sienta desolado, que mi alegría se venga abajo, puede hurtarme el porvenir. Pero aun así, Él sabe lo que hace". Tuvo muchos problemas, pero nunca se desanimó. El misterio de la cruz del Señor le mantuvo en pie.

José María Lorenzo Amelibia
Si quieres escribirme hazlo a: josemarilorenzo092@gmail.com
Mi blog: http://blogs.periodistadigital.com/secularizados.php
Puedes solicitar mi amistad en Facebook pidiendo mi nombre Josemari Lorenzo Amelibia
Mi cuenta en Twitter: @JosemariLorenz2
Volver arriba