El ser humano no tiene precio porque tiene dignidad
Cada ser humano vale por sí mismo, no es intercambiable con nada ni con nadie, precisamente porque es único. Cada ser humano tiene un valor absoluto.
Cada ser humano vale por sí mismo, no es intercambiable con nada ni con nadie, precisamente porque es único. Cada ser humano tiene un valor absoluto.
Para cumplir el consejo de Jesús de tratar al padre, al hijo, a la madre, a la esposa, al esposo, al compañero de trabajo, al jefe o al mandamás, no como nos trata, sino como quisiéramos que nos...
La fe como creencia no comporta la fe como encuentro; la fe como encuentro comporta la fe como creencia. No son dos concepciones opuestas, pero es necesario distinguirlas.
El contexto adecuado de la celebración de la Eucaristía es el amor fraterno y el compartir los bienes, que es lo propio de los hermanos.
Después de Pentecostés la liturgia presenta cuatro fiestas que recuerdan distintos aspectos del misterio de Cristo: Jesucristo, sumo y eterno sacerdote, Santísima Trinidad, Corpus y Sagrado Corazón.